¡Estoy tan sorprendida como vosotros! Resulta que en España tenemos campos de lavanda como en la Provenza Francesa en Brihuega, Guadalajara a 90 Km de Madrid para disfrutar de los cinco sentidos. Increíble…..¿Y qué no tenemos en España? Me emocionó tanto que he decidido contarlo para que se entere el mundo entero.
Concretamente en Brihuega, un pequeño pueblo de Guadalajara conocido como ‘El Jardín de La Alcarria’ por su belleza y gran cantidad de fuentes de agua de manantial, amplios parques y numerosos jardines, esconde los encantos de uno de los pueblos más bellos de Castilla la Mancha, declarado Conjunto Histórico Artístico por su gran riqueza monumental e historia. Cabe destacar que Brihuega fue declarado hace más de dos décadas conjunto Monumental Histórico y Artístico, debido a la gran riqueza de su arquitectura. Desatacando de entre otras la Real fábrica de paños de Carlos III y sus jardines, fundada en 1750 por el rey Fernando VI.
También se pueden ver las imponentes murallas del siglo XI, quedando hoy aún importantes vestigios en todo el perímetro del pueblo, conservándose las puertas de acceso al recinto amurallado como La Cadena y el arco de Cozagón. También se encuentra en buen estado el Castillo de La Peña Bermeja que cuenta con un recinto amurallado muy bien conservado y con una capilla de estilo gótico cisterciense, decorada con motivos mudéjares.
Se trata de una construcción en la que destaca la puerta de entrada barroca y los jardines de estilo romántico que ofrecen una magnífica panorámica sobre el rio Tajuña. Su curiosa geometría circular hace que sea visible desde cualquier lugar del pueblo. No te olvides de ver también las Cuevas Árabes o la Real Fábrica de Paños. Si por algo se caracteriza Brihuega es por la abundancia de sus manantiales que dan lugar a innumerables fuentes repartidas por todo el pueblo: entre otras cabe destacar la fuente Blanquina o de Los Doce caños.
También cabe mencionar el paso del Rio Tajuña a unos cientos de metros de la localidad formando abundantes bosques y sotos de rivera muy agradables para practicar la pesca, muy abundante en este río, teniendo también un coto intensivo de pesca de trucha que por un módico precio te ofrece la posibilidad de pasar un agradable rato de pesca. Por último, no olvides también adentrarte en la naturaleza y apreciar unos nuevos atardeceres vestidos de lavanda, al alcance de muy pocos.
Pero volvamos a nuestra protagonista la Lavanda. Su mejor característica es su perfume incomparable y las propiedades extraordinarias que posee. Una multitud de colores violetas, morados y azules tiñen los campos y las montañas durante el período de floración, de junio a septiembre. Conocida como el ‘Oro Púrpura’, la lavanda crece de forma salvaje, pero también ha sido cultivada por hombres que han sabido transformarla en una multitud de productos.
Setecientas hectáreas de cultivo que comenzaron alrededor de medio siglo cuando un vecino de la región trajo unas cuantas plantas desde Francia y comenzó con el cultivo en la zona. Durante el mes de julio, Brihuega y sus campos ofrecen al visitante color y perfume que hacen que el viaje sea un abrazo de sensaciones que asaltan nuestros sentidos.
El medio natural de Brihuega es puramente alcarreño. Es decir, se fundamenta en la alternancia de páramos y fértiles valles bañados por el río Tajuña. Lo que genera un notable contraste entre los bosques de encinas y quejigares y la agricultura de secano del páramo, las pequeñas huertas, los olivares y las plantas aromáticas, lavanda, espliego, romero, tomillo o salvia, de las cuestas y valles, que han proporcionado el asentamiento de colmenas para la producción de la miel.
En los bosques encuentran refugio y alimento pequeños y medianos mamíferos carnívoros como el gato montés, gineta, garduña y tejón. También destaca la comunidad reproductora de aves rapaces forestales representada por el azor y el gavilán y las rapaces migratorias, águila calzada y águila culebrera, así como la de rapaces nocturnas en la que destaca el búho chico y cárabo. Del mismo modo cabe mencionar la presencia de águila perdicera y el buitre negro que campea en la zona. En el páramo y el valle lo natural es ver grandes y pequeños rebaños de ovino, es bien conocido el cordero alcarreño.
Brihuega ofrece un viaje sorprendente al visitante para que puedan disfrutar de una experiencia inolvidable: Paseos en globo sobre los campos teñidos de un intenso color púrpura, visitas guiadas a los campos de lavanda, conciertos que harán que nuestra alma de ensanche, noches de cine al aire libre bajo un manto de estrellas y de este cielo que corona una de las tierras más bellas y poco conocidas del sur de Europa.
Durante el mes de julio comienza la cosecha a pleno sol. Aprovechando cada rayo de luz que impregna las flores y que una vez cortadas de manera artesanal en manojos, se sequen al sol lentamente. Después de unos días el agua se habrá evaporado dejando la más preciada de las esencias y camino de los alambiques dejaremos atrás una año de mimo y cuidados pero más de 75 años de experiencia y sabiduría.
La flor de la lavanda es utilizada desde la antigüedad por sus propiedades terapéuticas. Además de hidratar y nutrir en superficie, quizá lo más importante de estas esencias vivas son sus virtudes relajantes, tonificantes o descongestivas, captadas al instante por el olfato y que constituyen toda una ciencia curativa: La Aromaterapia.
El aroma de la lavanda es sin duda medicinal, pero también se usa en cosmética y la encontramos en las cremas, jabones, perfumes etc…, pero esta aromática flor es espectacular en la cocina, al integrarla en nuestros platos y bebidas. La lavanda, era utilizada de forma habitual entre otras especias en la cocina andalusí. Se emplean sus flores y su esencia. Es recomendable su uso en pescados y carnes rojas, destacando por ejemplo, el ternasco asado y la carne de avestruz al espliego. La lavanda casi en polvo es ideal para añadir a ensaladas, para aderezar un pollo guisado, un risotto o una pasta, una sopa de cebolla e infinitos platos más. El límite lo pone nuestra imaginación y buen gusto. Yo recomiendo añadirla directamente en el plato para que no se pierda el aroma.
Para hacer un vinagre de lavanda, podemos partir de un vinagre de vino elaborado en casa. El uso de este vinagre de lavanda es adecuado para ensaladas, verduras a la plancha, sobre unos espárragos blancos o un pescado a la plancha o al horno. No nos olvidamos de la miel de espliego, de color ámbar, con un sabor característico a lavanda, rica en hierro y recomendada para afecciones pulmonares, bronquiales y problemas cardíacos.
Como Curiosidades, en España se encuentran referencias escritas de su empleo en medicina a partir del siglo XIII. El nombre genérico proviene del latín: “lavare”, lavar, debido a que en la antigua Roma, utilizaban las flores para perfumar el agua de baño. Las hojas del espliego son más anchas que las de lavanda, de ahí procede su nombre específico que significa hoja ancha.
El Festival de la Lavanda en Brihuega festeja el principio de la cosecha de esta emblemática flor. A partir de ese día, millones de flores serán cortadas para posteriormente pasar por los alambiques, extraer su esencia y formar parte de los perfumes más delicados del mundo. Lo que empezó como un evento entre amigos se convierte en un evento exclusivo, reservado a unos pocos elegidos quienes podrán disfrutar de una experiencia emocional y sensorial en un marco incomparable dónde han actuado increíbles voces como la de Toni Zenet y Estrella Morente entre otros.
Una visita muy interesante para completar un día dedicado a la Lavanda, es conocer el interior de la destilería El Jardín de la Alcarria. Situada en la parte alta del pueblo de Brihuega, goza de unas vistas inigualables del pueblo y del valle del Tajuña. Con un exterior sencillo pero muy cuidado, al que se accede por un paseo decorado por plantas aromáticas, el interior no puede ser más sorprendente. La maquinaria fue traída desde Francia, contando con el consejo profesional de las destilerías de la Provenza, al sur del país vecino. El aroma nos invitará a disfrutar de unos de los mayores espectáculos olfativos de la Alcarria poco conocidos en el mundo.
Para los que quieran pasar la noche y yo, sinceramente lo recomiendo, hay varios hoteles y casas rurales. Aquí os dejo dos, Niwa Hotel Spa que ofrece masajes y tratamientos autóctonos exclusivos, como el ‘masaje de pindas aromáticas de la Alcarria’, un auténtico ritual detox-antiestrés a base de lavanda, espliego y lavandín de la Alcarria, y sus aceites esenciales puros.
El otro alojamiento es una casa rural, ‘Las Murallas’, pensada y diseñada acorde con el entorno que la rodea y en el que se han conjugado de manera armoniosa las comodidades y diseño actuales con la arquitectura tradicional como es la muralla que rodea a la villa de Brihuega. La casa dispone de un gran salón con chimenea y tiene una coqueta sala de lectura con una amplia biblioteca que dispone de libros de diversos estilos narrativos.
Hotel Spa Niwa
Plan Madrid
Brihuega Jardín de la Alcarria
Kleine Rose
Verema
Sabores de Mi Huerto
Ana,Jose & Cia